Optimistas

Tener y mantener relaciones saludables es como tener un empleo en el que se trabajan los 365 días del año, los 7 días de la semana cada minuto de las 24 horas. La comunicación es el proceso humano más importante después de alimentarnos. La mala comunicación ha sido causa de divorcios, peleas entre familiares, amigos y hasta guerras. Pero no solo debemos comunicarnos bien, también debemos hacerlo con empatía.

Lo más importante de la comunicación es saber escuchar, escuchar con los oídos, con el corazón y con el cerebro, abrirnos a entender lo que quieren decirnos. Todo esto construye una relación personal que puede durar mucho tiempo y que hará que la relación fluya sin contratiempos.
Aquí hay 5 consejos para establecer y mantener fresca tu relación.

Consejo # 1 La comunicación es imprescindible

Quizás esto ya lo has escuchado una y otra vez en internet o en libros, pero es cierto y es posible que me des la razón. Cuando dos personas son criadas en hogares distintos y son educados de maneras distintas y éstas se reúnen para formas una relación, es un hecho que van a tener diferencias de una manera u otra.

Hablar con los demás acerca de estas diferencias te ayudará a entender mejor al otro. Es necesario hablar y escuchar lo que el otro tiene que decir, “ponerse en los zapatos del otro”. Quizás puedas no estar muy de acuerdo con la otra persona pero al menos puedes llegar a la raíz del problema y así puedas tratar con la otra persona.

Consejo # 2 Aprender a decir “te amo” con tus palabras y ¡hasta con el cuerpo!

Cuando expresamos nuestro amor, estas palabras adquieren una gran importancia para quien las escucha, ya sea una pareja de 20 o de 80 y más aún si resultan difíciles de expresar. Todo cambia cuando sabes cómo expresar sentimientos, el mundo cobra otra realidad. Para hacerlo tan solo tienes que tragarte tu orgullo e ir poco a poco.

No esperes de un día para otro ser capaz de hacer discursos alucinantes, sino que poco a poco tienes que esforzarte en ser más claro y revelar tus sentimientos. Poco a poco ve abriéndote más hasta que el cómo expresar sentimientos se convierta en algo natural para ti. Escuchar también tiene un lenguaje no-verbal. La mirada es muy importante, mira a la persona con quién estés hablando, no hace falta que te fijes en sus ojos, pero sí en su cara. Demuestra que le estás escuchando asintiendo con la cabeza de vez en cuando, sonriendo.

Consejo # 3 Pasar tiempo juntos
Con la economía y los horarios tan ajetreados que caracterizan a nuestra generación, sé que resulta difícil poder pasar mucho más tiempo juntos, más no es imposible. Planifica una cita, tal vez podría ser un día de campo o incluso comer en el jardín de tu casa. Podrías ver una película o comenzar a ver alguna serie televisiva juntos para poder repetir esta actividad una vez por semana. Si crees que no tienes el tiempo para ello, entonces HAZ un tiempo. Esto mejorará en gran medida la salud de tu relación.

Consejo # 4 Ábrete emocionalmente

Muchas mujeres se embarcan en una relación sintiendo una profunda desconfianza hacia su pareja o incluso hacia todos los hombres. O bien temen abrirse demasiado por miedo a que les hagan daño. Estos temores están basados en experiencias dolorosas que no han sido superadas, y es muy probable que se repitan hasta sanarse. Pero si tú ya no atraes a parejas tóxicas, es señal de que has vencido a tus demonios y estás lista para algo mejor.
Hay que ser lo suficientemente fuerte para permitirle a tu pareja ayudarte a desempacar el equipaje que pudieses estar cargando de tu anterior relación.

Consejo # 5 ¡No tengas todas las respuestas!

Por último, pero no menos importantes, quisiera recordarte que cuando éramos pequeños en el salón de clases a nadie le gustaba un “sabelotodo” y lo mismo sucede en una relación. A veces es bueno ser malo, así es como se aprendemos las lecciones de la vida. Las caídas solo significan que aprenderemos a levantarnos. Esto es extremadamente difícil para la mayoría de nosotros, especialmente cuando amas a una persona y le estás permitiendo caer. Pero si vas al rescate todo el tiempo, tendrás que seguir viniendo al rescate y tu pareja nunca va a aprender.

Estar en una relación es como mirarse en ese espejo que muestra cada error así como todo lo bello que puede depararte el futuro. Todo depende de cómo actúes y manejes estas cosas que pudieras no haber visto antes. Es un trabajo duro pero vale la pena ¿No te parece?

Relacionarse con los demás es importante y con el fin de construir estas relaciones uno tiene que hacer uso de sus grandes habilidades de comunicación. Esto es particularmente cierto con los amigos y la familia, pero a veces hace falta un esfuerzo extra y debemos utilizar los temas idóneos para iniciar la conversación con el fin de poner en práctica nuestras habilidades comunicativas.

Muchos de nosotros, o bien no sabemos o no tenemos o simplemente hemos olvidado cómo iniciar y mantener una buena conversación como resultado de la sociedad en general carecen de las habilidades de conversación, hay una mayor necesidad de los pocos que tanto tienen – o están dispuestos a aprender – la habilidades de conversación necesarios para llenar el vacío que existe actualmente en nuestra sociedad hoy en día.

Es imposible construir relaciones sin haber tenido una comunicación efectiva. Hablar con las personas que conocemos y amamos nos ayuda a aprender lo más posible acerca de ellas y también aprender más sobre nosotros mismos.

Utilizando temas de conversación con la familia y los amigos tenemos la oportunidad de involucrarnos más en sus vidas, así como en sus actividades. Las habilidades de comunicación refuerzan los lazos que ya se han establecido entre las personas y profundizan sus relaciones. Son particularmente beneficiosos tanto para padres e hijos así como para los cónyuges.

En muchas familias la hora de comer se convierte en la mejor oportunidad para que los padres demuestren sus grandes habilidades de comunicación. Ellos entienden lo que buenos temas para romper el hielo pueden hacer por ellos y sus hijos. A pesar de que el diálogo en la mesa de la cena puede ser un poco más difícil para algunas familias, es fundamental para todos aprender sobre la vida diaria de cada miembro de la familia y así reforzar los lazos familiares y mantenerlos fuertes.

Esto pudiera significar que todos los miembros de la familia se involucren por completo a través de preguntas seguidas mientras se escuchan con atención lo que la otra persona está diciendo.

Cuando tratamos con niños pequeños los buenos arrancadores de conversación pueden ser algo tan sencillo como pedirle que le platique algo nuevo que hayan aprendido ese día. Nunca se sabe lo que se va a aprender cuando tu interacción es lo suficientemente buena.

La mayoría de los niños son más que felices cuando se les pide que demuestren lo que saben. Una buena manera de relacionarse con sus hijos y que hace uso de tus habilidades de comunicación muestran una gran inteligencia que puede ejercitarse. Sin embargo, no son sólo las preguntas las que significan más. Escuchar y mostrar interés en la vida del niño es lo que genera las mejores conversaciones con sus hijos.

La mayoría de las familias tienen miembros mayores, ya sean los abuelos o los tíos y tías a quienes les gustaría dedicar tiempo a sus familias y conversar acogedoramente cara a cara. Una buena forma de iniciar conversaciones con ellos es incluyéndolos en la conversación al pedirles que describan como era su vida cuando eran niños. Las buenas habilidades de comunicación también implican escuchar esas historias que narran como era la vida antes de tu nacieras y echar un vistazo al pasado y permitirnos descubrir eso que quizás ni siquiera imaginábamos.

Usar bien los temas para iniciar conversaciones con los amigos puede ser tan fácil como lo es con la familia. Aunque implicará diferentes tipos de preguntas. Ya que por lo general conocemos de manera más intima a los miembros de nuestra familia, cuando charles con tus amigos el enfoque no estará tanto en la familiaridad sino que la interacción estará encaminada a conocerse mejor.

Como sabes, la gente siempre está construyendo relaciones entre sí, con los amigos y la familia, y el mejor punto para comenzarlas será teniendo conocimiento sobre ellos. A veces, los temas que usemos para intentar llegar a conocerlos mejor puede que sean ignorados por la persona con la que queremos entablar una conversación para llegar a conocerla mejor, pero ese no es motivo para darse por vencido. Sólo tienes que elegir algo más de qué hablar. Las buenas habilidades de comunicación te ayudarán a construir mejores relaciones interpersonales y te alegrarás de no haberte dado por vencido.

Con esto en mente, ¿no crees que ya es el momento para que salgas y demuestres tus buenas habilidades de comunicación? Todo lo que necesitas son unos cuantos temas de conversación para romper el hielo y estará todo listo. Prepárate con un arsenal de asuntos o preguntas que puedas utilizar y te será mucho más sencillo comenzar y mantener una conversación.

¿Qué es la ergonomía?

Cada vez que nos sentamos en una silla, un sofá o la mesa, cada vez que entramos en un auto, ajustamos nuestro asiento y el espejo retrovisor, cada vez que abrimos la nevera, nos cepillamos los dientes o vemos la televisión, estamos interactuando con los objetos diseñados para servir a los humanos. Todos son ejemplos de Ergonomía.

Se sabe que mucha de la fuerza laboral se genera frente a un ordenador y que el dolor de cuello y espalda son las razones más comunes para el tiempo de trabajo perdido. ¿Te suena familiar?

Nosotros, los humanos no están diseñados para llevar una vida sedentaria. Estamos hechos para movernos y estirarnos, no para quedarnos quietos en un lugar durante largos períodos de tiempo. Por ello ¡No es de extrañar que suframos de dolor crónico de cuello y hombros!

Ergonomía se manifiesta en todos los aspectos de la experiencia humana. Las tensiones físicas impuestas a las articulaciones, músculos, nervios, tendones y huesos son factores ambientales que pueden afectar la audición, la visión, el bienestar general y la salud.

Los motivos de estrés físicos pueden incluir: movimientos repetitivos de mecanografía, el uso continuo de un equipo, la vibración de una pieza de maquinaria o la tensión producida al levantar cajas pesadas. Trabajar en una posición incómoda (como acomodar el teléfono entre el hombro y las orejas) puede causar dolorosos problemas a largo plazo.

Los factores ambientales pueden incluir un ruido excesivo, pero está por ejemplo, el llamado “síndrome del edificio enfermo” que produce dolores de cabeza, congestión, fatiga y erupciones cutáneas que resultan de mala calidad del aire en un edificio o una oficina. La iluminación inadecuada puede causar fatiga visual y dolores de cabeza, mal humor y falta de concentración. Los malos olores y los humos tóxicos pueden ser una amenaza para la salud y todos sabemos que la tensión prolongada puede llevar a la una gran cantidad de enfermedades físicas.

Todos los sentidos entran en juego cuando se trata de Ergonomía. Aunque la ciencia de la ergonomía se asocia con el lugar de trabajo, por la mayoría de la gente, sus principios se aplican a todas las habitaciones de tu casa, cada hospital, cada sala de cine, un supermercado y así sucesivamente.

Las siguientes son algunas excelentes estrategias para habilitar una vida más sana y productiva:

El elemento más importante en tu oficina es ¡tu silla!

Una silla ergonómica puede representar un gasto extra, pero a lo largo de los años de uso constante te pagará dividendos invalorables. Al mantener tu cuerpo en buena alineación te ahorrarás una buena cantidad en honorarios de médicos y quiropráctica, así como eliminar las posibles enfermedades crónicas a futuro que puede ocurrir debido a la negligencia en el presente.

Se sabe que pasamos un tercio de nuestra vida durmiendo, así que hay que comprar un buen colchón para la cama. También pasas otro tercio de tu vida trabajando sentado, así que es cuestión de sentido común el comprar una buena silla.

El respaldo de una silla ergonómica debe apoyar la curva natural de tu columna vertebral, proporcionando apoyo en la espalda baja.

Debe ser lo suficientemente alto como para apoyar el hombro y el cuello y al mismo tiempo permitir la flexión y el movimiento para llegar a las actividades cuando se está sentado.

Debe permitir el ajuste de la altura para que puedas sentarte cómodamente con los pies apoyados en el suelo, con las rodillas en un ángulo de 90 grados y en paralelo a las caderas. La altura de la silla debe permitir una curva de 90 grados con el codo para acceder al teclado y un mínimo de curvatura en la muñeca. Evita el uso del resto del brazo mientras trabajes para reducir el estrés en la muñeca y las articulaciones de los dedos.

Los apoyabrazos deben ser ajustables en altura y posición para dar cabida a los diferentes usuarios y actividades. Es necesario poder apoyar los brazos para que descanses tus hombros en una posición cómoda cuando estás trabajando. Esta es una característica importante si estás escribiendo en la computadora gran parte de tu día.

 

En cuanto a la colocación del teléfono, utiliza un auricular o el altavoz si es posible. Esto mantendrá tus manos libres y aliviará el esfuerzo de tu cuello. Si esto no es posible coloca el teléfono al alcance de tu mano izquierda si eres diestro, y viceversa, lo que permitirá a tu mano dominante escribir y realizar otras tareas mientras estás en el teléfono.

Entonces ¿Qué es la ergonomía? Mi respuesta simple y escueta sería” “la protección del organismo humano contra las tensiones cotidianas.”

«Egoísta» Es una palabra que posee muchas connotaciones negativas. Para muchas personas significa lo mismo que ser codicioso, auto preocupado o absorto en uno mismo. Pero la verdad es que si tú no cuidas de ti mismo, no puedes esperar a que nadie más lo haga por ti. Es ilógico ¿porqué nuestra felicidad o bienestar personal sería responsabilidad de alguien más?

Muchas personas se ponen al final en la lista de personas importantes en su vida. Las madres suelen considerar a los niños, su pareja, sus padres, hermanos menores o mayores antes de pensar en sí mismas. Los padres a menudo consideran a la familia y el trabajo más importantes que ellos mismos.

Es razonable considerar las necesidades de los demás como algo importante. Los niños pequeños, por ejemplo, necesitan mucha atención, apoyo y un ambiente amoroso lleno de cuidados. Sin embargo, cuando una persona se hace cargo de sus propias necesidades es mucho más positiva, sana y equilibrada como individuo.

La clave está en la palabra equilibrio. Estas personas están haciendo cosas por las razones correctas, porque han pensado las cosas, decidido las elecciones que tienen que hacer y tomado en cuenta todos los hechos pertinentes.

Una persona tiene que sentirse satisfecha y conforme, saber que vale la pena lo que está haciendo y llegar a un acuerdo satisfactorio entre las distintas áreas de su vida. Así, por ejemplo, hacer un trabajo aburrido pero que genera una buena paga con tal de darle lo necesario su familia es un buen ejemplo de compromiso del que debe enorgullecerse y valorar sus propios esfuerzos, además estas personas son capaces de encontrar compensaciones en otros lugares o momento. Tal vez esta persona se asegura de que los fines de semana son momentos de diversión con su familia, por ejemplo.

Tenemos que reconocer la diferencia entre ser apropiadamente asertivo en lugar de ser negativamente egoístas. El lógico que logres ponerte de pie por uno mismo, esperando ser tratado adecuadamente y con respeto. Pero hay un equilibrio, otros tienen derecho a ser escuchados y tomados en cuenta también.

Algunas personas dirán que cuidar de sí mismos un asunto de buena educación. Se está quitando la carga de la responsabilidad de su bienestar a los demás. Cuidar de uno mismo significa que reconoces que cuando tienes hambre, sed, o cansancio, tus necesidades físicas requieren de un poco de atención. La mayoría de las personas acepta y encuentra razonable este comportamiento, si se tiene sed debemos ir a tomar una bebida, si tenemos hambre es necesario ir a buscar algo de comer o si se está cansado es aceptable tomarte un descanso si lo necesitas.

Esta forma de pensar debe aplicarse igualmente a las relaciones personales, tener límites y ser claro en cuanto a la forma en cómo esperas ser tratado, pidiendo las cosas que necesitas de manera adecuada. El respeto, la atención y la consideración son buenos modales que todos esperamos, no solo de los demás sino hacia los demás.
Esta consideración debe aplicarse en todas las relaciones, no sólo asociaciones emocionales. Entre miembro de la familia, como de padre e hijo, maestro y alumno, jefe y personal, proporcionando el respeto merecido y especificando límites necesarios y mutuos para un trato justo y razonable. Esto permite a una persona tener confianza, con un fuerte sentido de sí mismo y de cómo pueden prosperar en el mundo.

La confianza permite que cada uno de nosotros funcione bien en nuestra vida. Cuando niños aprendimos acerca de los límites y las buenas costumbres. Esta base nos permite crecer más, la comprensión de la importancia de tomar decisiones, haciendo cosas por las razones correctas, porque queremos, o porque hemos decidido que es lo que hay que hacer en ese momento. Esa es una buena negociación que hemos hecho con uno mismo.

Puede haber momentos en los que se te pide hacer algo que realmente no quieres hacer. A veces, luego de la evaluación de los distintos factores es que entonces podrás decidir continuar y hacerlo de todos modos. Podemos sentir que la decisión de hacer feliz a otra persona o la de ir a algún sitio en el que no estamos demasiado interesados en visitar es una elección justa porque va a complacer a nuestro amigo. Esta es una decisión razonable, basada en dar y recibir. Y, cuando nuestro amigo es feliz y se siente que hemos tomado una decisión generosa, esto beneficiará nuestras relaciones personales.

A veces la decisión de hacer algo por razones distintas a las de nuestra propia gratificación personal es correcta. Cuando tenemos claros los criterios para tomar la decisión y estamos dispuestos a continuar, entonces ten por seguro de que esa es una buena decisión. Las opciones no son siempre hacer lo que uno quiere hacer. La alegría, la satisfacción y el equilibrio en la vida a veces se basan en elegir complacer también a los demás.

Cualquier persona puede dominar el arte de la conversación y hacer nuevos amigos tanto en una situación laboral como personal. Así, conseguirá ser más feliz y triunfar más fácilmente en la vida. La principal cualidad de un buen conversador consiste en ser, ante todo, un buen oyente.

Esto significa, escuchar activamente a su interlocutor e interesarse genuinamente por lo que a este le interesa al tiempo que se habla de aquellos temas que le interesen al otro. ¿Alguna vez has estado en una conversación en la que todo iba bien hasta que no supiste que decir? A continuación te presento una serie de consejos para llegar a ser un mejor conversador.

Encuentra temas en común
Para conversar con otra persona es necesario que haya un tema común o un interés de los que ambos puedan hablar o la conversación simplemente se desvanecerá con el tiempo. Tu trabajo es encontrar temas en común. Es importante esforzarse por aportar ideas o datos interesantes, para que la otra persona no sienta que lo da todo sin recibir nada a cambio.

Para tener conversaciones interesantes deberás convertirte en una persona informada, que siempre tenga algo que contar, ya sea de actualidad, de noticias de periódicos, de libros, de películas, de sociedad… sé una persona curiosa y lee con frecuencia, dedica algún tiempo a documentales, salte de la típica rutina de programas basura, y tendrás ideas para conversar horas y horas con las personas que te sean afines.

Incluso podrías descubrir algunas cosas sobre la otra persona y así mismo, compartir un par de cosas de ti mismo. Descarta temas hasta que encuentres un tema con el que ambos logren enfrascarte y la conversación fluirá sin problemas.

Conversa y deja conversar
Una conversación es una actividad que requiere la participación de dos personas. Naturalmente, esto también requiere la participación activa de dos personas. Ambas partes tienen que contribuir a la conversación, es una calle de dos vías.

Si simplemente divagas acerca de ti sin que la otra parte tenga la oportunidad de hablar te garantizo que esa conversación está destinada al fracaso. En lugar de eso haz preguntas acerca de la otra persona y dale la oportunidad de compartir. Cuando la conversación fluye de esta manera también tienes la oportunidad de compartir algo de ti también. Recuerda, este juego tiene que ser jugado por dos personas para que sea divertido.

Involucra a todo el mundo

Si te encuentras charlando en un grupo donde algunos de los miembros son más bien oyentes, toma la iniciativa para darles la oportunidad de hablar. Tal vez sean demasiado tímidos como para tomar ellos mismos la iniciativa. Una excelente conversador es capaz de comprometer a todos a su alrededor y estimular la conversación como sea posible.
Es importante compartir con el otro tu punto de vista o anécdotas similares, pero asegúrate de que tu intervención no sea demasiado extensa.

Quien más habla es quien más importante se va a sentir, y si quieres ser recordado por ser tus habilidades conversacionales, entonces permite que el otro así lo perciba. Acostúmbrate a cederle al otro la palabra es sencillo, es cuestión de dejar nuestro ego aparte. La idea es ganarse a la otra persona, reforzar vínculos y ampliar nuestro círculo social, en lugar de demostrar todo el tiempo nuestra superioridad o vencer a los demás en una discusión interminable.

¡Intégrate!

Trate de no pasar demasiado tiempo hablando con una persona, por mucho que disfrutes de la conversación. Las reuniones sociales son lugares donde se espera integración de sus participantes para que hagan nuevos amigos. Recuerda que las reuniones sociales no están diseñadas para que dos personas se refugien en un rincón y hagan caso omiso a todos los demás.

Se más descriptivo

Un buen conversador utiliza detalles, descripciones precisas, nombres y colores cuando habla. Todos estos matices sutiles ayudará a hacer lo que sea que usted está diciendo mucho más interesante para los oyentes.

Usa la técnica del espejo
Ésta es una técnica comúnmente utilizada en el campo de la persuasión. Se trata de imitar los gestos y el tono de la otra parte para que sienta que eres similar a ella. Esto hace que se sientan más a gusto contigo y se puede establecer una familiaridad con mayor facilidad.

Tal vez podrías «reflejar» el tono y el volumen de tu voz para que coincida con la otra persona, o incluso copiar algunos de los gestos de las manos. Sin embargo, ten cuidado de hacerlo de manera sutil y no excesivamente. Exagerar puede hacerte parecer extraño.

Apégate a los temas cotidianos

Evita temas en los que no todo el mundo puede estar interesado. Apégate a temas más cotidianos, como los planes para las vacaciones, por ejemplo. Tal vez una conversación sobre el clima sea el tema ideal para comenzar, la clave es mantener a todos involucrados y no aburrirlos.