¿Cómo mejorar tu ánimo a través de la alimentación?

Aunque se ha comprobado con los años a través de múltiples estudios que una mejor dieta ayuda a conseguir mayores niveles de energía y mejora el estado de ánimo, el cambiar por completo nuestra dieta resulta una tarea colosal. Por fortuna, podemos comenzar implementando pequeños cambios que no resultaran tan drásticos en primera instancia. Los carbohidratos se descomponen dentro del organismo involucrando a la glucosa en dicho proceso, y ésta es, a su vez, el mineral que se utiliza mucho a nivel cerebral. Es por esto que excluir por una dieta, de un día para otro, los hidratos de carbono  puede producir ciertos cambios anímicos en aquel que se somete a un sistema alimenticio estricto carente de hidratos de carbono.

La falta de hierro puede desencadenar depresión, fatiga y dificultad para poner atención. Algunos alimentos ricos en hierro son las carnes rojas, la yema de huevo, frutas secas, frijoles, hígado y las alcachofas. Nuestro ánimo se ve afectado sobre todo cuando hay una deficiencia  de  vitaminas, especialmente C y las del grupo B. También cuando no estamos tomando las proteínas suficientes, ricas en aminoácidos, como el triptófano y la l-fenilanina, que combate el estrés.

Entre los alimentos que destacan por su alto contenido en vitaminas así como por su fácil inclusión en nuestra dieta destacan:

 Plátano. Si los evitas por la noche, no te engordarán y te aportarán grandes dosis de triptófano, un componente imprescindible para la producción de serotonina, que actúa sobre el bienestar emocional y el sueño. La ‘fruta del buen humor’ también contiene dopamina, la hormona responsable del placer. Entre horas, te da energía y evita las bajadas de glucosa.

Nueces. Amigas del corazón, son ricas en magnesio, manganeso y antioxidantes. También contienen vitamina B6, que fortalece el sistema inmunitario y equilibra los nervios. También es una fuente natural de melatonina, la hormona del sueño. Perfectas para picar sano entre horas.

Legumbres. De bajo índice glucémico, estabilizan la tasa de azúcar en sangre, evitando la hipoglucemia y la fatiga, que pueden hacerte sentir depre. Los garbanzos son ricos en magnesio y vitaminas del grupo B, y las lentejas tienen una gran cantidad de hierro. Ambas son muy digestivas si se cocinan sin grasa o se toman en ensalada.

Espinacas. Contienen grandes dosis de vitaminas A y C, un cóctel antioxidante que repara los daños producidos por el estrés. Sus hojas son una de las mejores fuentes de vitaminas B6, B9 y B12 que actúan sobre el humor, el estado de ánimo y otras funciones cerebrales. También tienen un alto contenido en magnesio y ácido fólico, regulador del apetito y el sueño.

Un chocolate mediano o varios chicos. El azúcar del chocolate puede aumentar la producción de endorfinas, que son analgésicos naturales y se cree que de otra sustancia, llamada anandamida, la cual mejora el humor.

Palomitas de maíz y/o galletas integrales. Como elevan la secreción de serotonina, neurotransmisor que produce una sensación de bienestar, estos alimentos ricos en carbohidratos y fécula tienen un efecto tranquilizante y pueden ayudar a aliviar la depresión.

Puré de papas. Este alimento con un alto contenido de fécula puede aumentar la producción de serotonina y tener un efecto calmante.

Otros alimentos que poseen cierto efecto calmante sobre el sistema nervioso y ayudan a apaciguar  la ansiedad son: lechuga, avena, arroz, remolacha, acelgas, apio, endibias, legumbres, aceitunas, alfalfa, centeno, frutos secos y semillas. Las proteínas afectan a la dopamina y la norepinefrina, neurotransmisores responsables de los estados de alerta, excitación y agudeza mental. Si se siente débil probablemente quiera comer alimentos ricos en proteínas como carne, pescado, aves, queso, crema de cacahuate o frutos secos.

El agua es otro que sin ser estudiado se sabe lo que podría provocar anímicamente en caso de no ser ingerida con frecuencia. Y es que andar por la vida sediento, sobre todo los más pequeños, no sería ninguna gracia, lo que podría culminar con cansancio por decir algunos síntomas, influyendo de este modo de manera importante en nuestro ánimo.

Es importante que recuerdes que la comida es el combustible de nuestro cuerpo si te saltas una comida es probable que te sientas cansado y de mal humor. Al pasar demasiado tiempo sin comer los niveles de glucosa en la sangre disminuyen y tu humor puede cambiar fácilmente. Procura comer por lo menos cada 4 horas. El desayuno es particularmente importante (especialmente para los niños). Pero hablamos de desayunar café y pan dulce, nos referimos a un desayuno con fruta y fibra o avena con leche.

 

6 Remedios caseros para el dolor de cabeza

El estrés, los dolores de cabeza y la tensión, afectan a casi todos de vez en cuando. Por lo general no son una señal de algo serio, más bien una molestia menor que por lo general se puede remediar con un analgésico suave. El dolor de cabeza o cefalea generado por estrés produce un dolor leve, a menudo descrito como una cinta apretada alrededor de la cabeza.
dolor de cabezaExisten numerosas causas para los dolores de cabeza ocasionados por la tensión pero la mayor parte del tiempo las causas son desconocidas. La buena noticia es que se pueden remediar fácilmente con ayuda de un analgésico y un estilo de vida saludable. Conozco un par de remedios caseros para el dolor de cabeza, una opción mucho más práctica y segura que la automedicación.

1. Aromaterapia
Desde hace mucho tiempo se sabe que los aromas tienen un poderosos impacto en nuestros sentidos, en nuestro cuerpo y favorecen nuestro bienestar, por ello que la aromaterapia sea tan popular hoy en día. Todo el mundo tiene sus aromas favoritos y muchas veces solemos asociar un aroma con algo en particular. Para ayudar a aliviar los dolores de cabeza se recomienda el aceite de lavanda o eucalipto. Simplemente humedece tus dedos con estos aceites y masajea tus sienes en movimientos circulares conforme las manecillas del reloj. O bien, puedes optar por encender velas hechas con éstos aceites. Otra sugerencia de uso es colocando 5 gotas de aceite de lavanda en agua tibia. Moja un paño de tela con esta infusión y luego colócalo en tu frente o cuello.

2. Masajes
Cuando tengas dolores de cabeza, pídele a una persona que te masajee el cuello, los hombros y la cabeza. Es recomendable que lo haga alguien más para una mejor manipulación del masaje. Si estás solo, puedes mover la cabeza de un lado a otro, hacer estiramientos, enlazar las manos por detrás de la espalda e inclinarte poco a poco para después regresar a la posición inicial y así sucesivamente. Los masajes favorecen la circulación sanguínea que a veces son los causantes de dolor de cabeza. Si es posible, descansa en un ambiente silencioso y tranquilo después del masaje.

3. Ejercicio
El ejercicio regular es una buena forma de aliviar o prevenir los dolores de cabeza. Cuando hacemos ejercicio, el cuerpo relaja los músculos y libera la tensión. Además, al practicar ejercicio se liberan endorfinas, conocida como la hormona de la felicidad y cuya función es similar a la morfina.

4. Agua tibia y caliente
Coloca agua caliente y agua tibia en recipientes lo suficientemente hondos como para sumergir los pies hasta los tobillos; sumerge tus pies en agua caliente aproximadamente por un minuto, posteriormente haz lo mismo con el agua tibia y así sucesivamente durante 20 minutos. Esto activará la circulación sanguínea en los pies, descongestionando los vasos sanguíneos de la cabeza.

5. Compresas frías
Humedece un paño con agua helada o coloca algo frío en la zona en donde sientas dolor. Con esto puedes ayudarte a disminuir el dolor. También puedes usar una bolsa con hielo, solo mete varios cubos en una bolsa pequeña de plástico y amárrala para que no se vayan a salir. Si te es posible, combina las compresas con un poco de relajación, ya sea recostándote un rato y respirando profundamente. Relajar los ojos puede ser un remedio efectivo también., solo tienes que poner rodajas no muy delgadas de papa sobre tus párpados y cambiarlas cuando estas se caliente por otras frescas.

6. Té de manzanilla
Agrega dos cucharadas de manzanilla a medio litro de agua caliente, también puedes usar los sobrecitos de té de manzanilla. Espera unos minutos y cuela. Agrega unas gotas de limón para mejores resultados. El té de manzanilla también se puede utilizar frio, sólo agrégale un par de cubitos de hielo, empapa un paño con el té y ponlo sobre tus párpados.

3 buenos hábitos para tu cerebro

La manera más sencilla de mejorar tus capacidades cerebrales y hacerte más inteligente es teniendo hábitos saludables que llevarán tu mente al siguiente nivel sin mucho esfuerzo. Seguramente eres de las personas que desean una mejor memoria, ser mucho más creativos o simplemente ser capaz de encontrar solución a algunos problemas con mayor facilidad. ¿Cómo podrías lograr esto? Solo es cuestión de incorporar ciertos hábitos en tu rutina diaria y tu desempeño mental comenzará a mejorar:

3 buenos hábitos para tu cerebroSigue una buena rutina de sueño.  Dormir es algo extremadamente necesario para tu cuerpo entero. El sueño es una necesidad vital para tu cerebro. El descanso ayuda a conservar la integridad del circuito neuronal implicado en los procesos de memoria y de aprendizaje.

Se ha comprobado que el sueño es imprescindible para la salud mental, pues una mala calidad de sueño está relacionada con una mayor probabilidad de padecer depresión y con el aumento de la ansiedad y la irritabilidad, entre otros trastornos similares.

El sueño también permite reelaborar y fijar las experiencias y los aprendizajes vividos durante el día para convertirlas en recuerdos permanentes y nítidos.

Consume “alimentos para el cerebro”. Ciertos alimentos contienen sustancias, que sintetizadas por tus neuronas, permiten que tu cerebro funcione. Estos son los que en lenguaje científico se llaman neurotransmisores. No dudes en incluirlos en tu dieta para mejorar y mantener tu capacidad intelectual y tu memoria de manera sorprendente. ¿Quieres saber qué alimentos son los más indicados para mantener tu memoria a punto?

Nueces. Contienen cantidades elevadas de antioxidantes, que pueden combatir el daño causado por los radicales libres de nuestro cuerpo en el ADN de las células del cerebro.

Zanahorias. Además de ser buenas para la vista, también son excelentes para el cerebro. Contienen niveles elevados de un compuesto llamado luteolina, que pueden reducir la pérdida de memoria relacionadas con la edad y la inflamación en el cerebro.

Espinacas. Las vitaminas C y E, que encontramos en las verduras de hoja verde, ayudan a mejorar las capacidades cognitivas.

Pescado. Aunque las investigaciones recientes han mostrado que el consumo de suplementos de aceite de pescado puede no ayudar a retardar el deterioro cognitivo en las personas con la enfermedad de Alzheimer, otros estudios han señalado que comer pescado rico en ácidos grasos omega-3  (Como el salmón) sí podría ayudar en desacelerar el deterioro cognitivo típico que se da con la edad.

Café y té. El consumo moderado de té o café, además de mantenernos despiertos, también pueden ayudar a prevenir el cáncer del cerebro, evitar derrames, prevenir la enfermedad de Alzheimer y mejorar la función cognitiva. Su riqueza en catequinas que estimulan la memoria así como la presencia de teína que favorece la concentración y estimula la actividad nerviosa son de ayuda para el funcionamiento cerebral.

La riqueza en antioxidantes derivados de frutas y verduras, así como sus flavonoides protegen el cerebro y garantizan un menor envejecimiento celular. Y nutrientes específicos tales como el ácido fólico, que contribuye al desarrollo del tubo neural en el feto, es de importancia para el cerebro, porque además en adultos una deficiencia de folatos aumenta el riesgo de sufrir demencia o pérdida de memoria.

Aprende algo nuevo.  El punto de tener un cerebro es precisamente el aprender a adaptarse a nuevas situaciones. Una vez que nacen nuevas neuronas en tu cerebro ellas sobrevivirán dependiendo del uso que les des. Desafía continuamente a tu cerebro con nuevas actividades.

Aprender una nueva habilidad pone a trabajar a múltiples áreas cerebrales. Tu memoria entrará en juego, aprenderás nuevos movimientos y asociarás las cosas de un modo diferente. Un buen método es desafiar a tu mente con puzzles, sudokus y otros juegos de lógica que mantienen tu mente activa. Aprender cosas nuevas todo el tiempo es otro de los métodos para que tu mente trabaje activamente.

¿Cómo salir del atasco?

En normal que en ocasiones nos sintamos atascados, esto se debe a un estado de “desempoderamiento” de la mente.  Es como si quisieras algo, pero algo allá afuera te lo impide, haciéndote sentir sin control de tu vida, impotente. Solemos sentirnos como victimas de las circunstancias.

¿Cómo salir del atasco?Muchos life coaches sugieren que para salir del atasco, tenemos que dar un paso fuera de ese límite que nos trazamos, cambiar nuestra forma de pensar y buscarle una nueva perspectiva a la vida. No volverás a sentirte atascado una vez que recuperes el dominio de la situación.

A continuación te presento un par de  fáciles consejos para logras salir del atasco y  echar a andar tu vida hacia delante.

Identifica porqué te sientes atrapado.   Asegúrate de comprender porque te sientes atascado y en dónde te sientes así. ¿Te sientes atrapado en tu trabajo? ¿En tu relación, en tu vida social? Mientras mejor puedas identificar el origen sabrás con mayor exactitud en dónde es que estás atascado y qué es lo que ocurre contigo en esa área para que te sientas así. Analiza si puedes explorar los motivos de una manera más minuciosa. Este simple paso podría darle mucha más claridad a la situación.

Asesórate con un  coach de vida. Aunque muchos consideran que coaching es similar a la consejería, ese no es el caso. En el proceso de coaching el coach se concentra en las cualidades positivas del cliente y lo ayuda a que el descubra su máximo potencial. Sin embargo, en la consejería, la concentración es en el problema y como proveer soluciones para que el cliente lo resuelva tomando en cuenta las pautas que el consejero le ha dado.

Es normal que tengamos un “punto ciego”, algo de lo que no nos percatamos hasta que alguien más lo señala. Un coach de vida es la persona idónea para ayudarte a identificar lo que te mantiene atascado.

Lleva un diario.  Invierte al menos 15 minutos de tu día en esto. Enlista los motivos por los que te sientes estancado, qué oportunidades puedes aprovechar durante ese día, porqué no ha funcionado o que has intentado, qué nuevas ideas podrías intentar poner en marcha.  Hazte este tipo de preguntas específicas, seguramente las respuestas te sorprenderán una vez que las reflexiones.

Medita. Practicar la meditación hace que te sientas más optimista, aumenta tu empatía, mejora tu capacidad cognitiva (memoria, atención, concentración, rendimiento académico). La meditación  mejora tu autocontrol y tu autoestima, reduce el estrés, aumenta la salud física, reduce la ansiedad, la depresión, el dolor de cabeza y el dolor en general. Es sabido que las personas que practican la meditación  se sienten más positivas y tolerantes hacia los demás, se sienten más relajados pero con la mente más alerta. En definitiva, sientes una mayor serenidad y bienestar al practicar la meditación.

Plática con las personas que te rodean. Una vez más, recuerda que en ocasiones cuando te sientes atascado lo único que necesitas es una nueva perspectiva para analizar lo que estas pensando. Los prejuicios no sólo dañan a las personas que te rodean sino también a ti, ya que limitan la interacción y tu desarrollo dentro de un ámbito social.

Investiga al respecto.  Al igual que muchos otros temas, puedes informarte al respecto buscándolo en internet.  El tipo de investigación que  realices es a tu consideración, puede ser muy general o específica. Quizás quieras comenzar buscando nuevas estrategias o tácticas que te acerquen a tus metas. Pudieras incluso encontrar un artículo de un autor que desconocías sobre una situación similar o podrías visitar los concurridos foros de discusión en los que otros tienen problemas similares a los tuyos y comparten sus métodos para lidiar con esto.

El hueco en donde se establece el estancamiento se llama conformismo, la bacteria emocional más peligrosa se llama justificación. Todos los seres humanos hemos pasado por este proceso, es parte de la vida sentirse estancado, imagina si no te sintieras estancado en algún momento no habría el anhelo de salir adelante y otra vez terminaríamos en el circulo vicioso, el conformismo.

En la  vida no siempre se cumplen nuestros deseos y si siempre se cumplieran quizás perdería ese encanto propio que los desafíos de la misma presentan. Hay que intentar lograr  las cosas que nos proponemos,  poner el máximo en ello pero sin despegar los pies del suelo cuando veamos que es algo inaccesible en aquel momento. El estancamiento no es eterno, ya que dura tanto como tú lo desees.

Descubre como una alta autoestima aumenta tu productividad laboral

¿conoces a alguien que haya tenido éxito haciendo crecer un roble al plantar una semilla de melón? Supongo que la respuesta definitivamente es “no”. La razón de porqué estoy segura de esto es porque en la naturaleza hay leyes: “uno siembra lo que cosecha”. Muchos de ustedes me dirán “pues sí, es bastante obvio” Pero yo creo que no es tan obvio, porque muchas personas están constantemente tratando de obtener algo de la nada.

Los empleados de las empresas, los directivos de altos puesto y todos los humanos en general, siempre queremos más y de ser posible, que sea GRATIS. Siempre queremos más de esto, más de lo otro, y otra vez, más de aquello, pero no queremos hacer un esfuerzo para crear valor.

Ni siquiera estoy segura de que el concepto de “creación de valor” sea ampliamente entendido; mucha gente confunde la actividad y el esfuerzo con creación de valor.

Descubre como una alta autoestima aumenta tu productividad laboral La creación de valor no se genera entrando a las 8 am y saliendo a las 5 pm sino que, en realidad depende de lo que sucede en ese lapso de tiempo.

Por ejemplo, ¿desayunas, charlas con tus compañeros de trabajo lo que sucedió la noche anterior o el fin de semana, dedicas un par de horas a Facebook o simplemente navegar por la red, tomas descansos para fumarte un par de cigarrillos en el baño, llegas tarde y después del almuerzo, apagas tu cuerpo y mente antes de finalizar la jornada? Esas actividades solo te restan.

Las investigaciones confirman que la mayoría de los empleados ¡no son más que 50%productivos en el trabajo! ¡Qué desperdicio de recursos y lo peor, es que desperdicias tu vida! 35% de tu vida lo pasas en el trabajo.
Para aumentar tus ingresos tienes que trabajar todo el tiempo que pasas en el trabajo. Todas tus actividades deben ser de gran valor, así el éxito y el progreso vendrán. Algunos ejemplos de actividades que añaden valor son los siguientes:
• La búsqueda de soluciones creativas a los problemas
• Reduciendo el costo de alguna tarea, producto o servicio
• Solucionando conflictos
• Cerrando un negocio o venta
• Haciendo las cosas más rápido y con mayor precisión

Un gran ejercicio diario es escribir de 5 a 10 éxitos que hayas logrado al final del día.
Realmente ayuda a entender lo que significa la creación de valor en un nivel muy personal. La creación se trata de sumar, ¡no de restar!

Cuando la gente dice “uno cosecha lo que siembra” se aplica a todos los aspecto de la vida incluyendo el trabajo. Las investigaciones han demostrado que la mayoría de los problemas del mundo puede vincularse a una causa: la baja auto-estima.

Todos los seres humanos tenemos una opinión de nosotros mismos como personas. Esta idea o imagen es fundamental para nuestra autoestima y definitivamente, afecta la manera en que nos sentimos sobre nosotros mismo así como el valor que nos damos a nosotros mismo. Sin embargo, la autoestima no es algo que no se pueda cambiar.
Ser positivo, buscar el bien o por lo menos buscar lo que se puede aprender de cada experiencia, es un muy buen punto de partida para aumentar nuestra autoestima. Tanto ser positivo como ser negativo son un hábito que se forjó durante nuestra vida.

Si somos negativos, somos más propensos a tener una baja autoestima porque nos centramos más en los errores que hemos cometidos y en nuestras debilidades percibidas. Por otro lado, mientras mayor sea nuestra autoestima, es probable que veamos las cosas más positivamente.

Si nos basamos en la afirmación de que “la mayoría de los problemas se deben a la baja autoestima” podemos deducir que esto es la raíz a problemas de baja productividad y la resistencia al cambio.

Las personas con altos niveles de autoestima son más propensas a tener éxito en sus dos ámbitos profesionales y personales, ya que sí agregan valor. Estas personas están dispuestas a pagar el precio – en tiempo, esfuerzo e inversión personal – para alcanzar el éxito, llegar ser mejores, más inteligentes, más fuertes y con más conocimientos.

El beneficio de estas personas se incluye recompensas financieras personales y en su carrera, una reputación de profesional dentro del departamento u organización en la que se trabajé, así como un gran reconocimiento como alguien confiable.

Si no te sientes cómodo, quizá sea el momento de cambiar de aires, en el portal www.infoempleo.com seguramente lo encontrarás.

Sin embargo, la recompensa más grande será la satisfacción personal de un trabajo bien hecho.