En el cerebro humano hay más de cien mil millones de neuronas. Están conectadas entre sí a través de una compleja red de procesos nerviosos. El mensaje de una neurona a otra es transmitido a través de diferentes transmisores químicos. La entrega de mensajes tiene lugar en puntos de contacto especiales entre neuronas, llamados sinapsis.
Cada neurona puede tener, como media, mil sinapsis o contactos con otras neuronas. En el cerebro puede haber de diez a cien billones de sinapsis y cada una de estas sinapsis funciona como una calculadora diminuta que registra en forma de impulsos eléctricos las señales que recibe.
Las células cerebrales puede morir y al hacerlo, las habilidades mentales se vuelven menores, lo cual te vuelve menos listo. Existen ciertas cosas que provocan la muerte “no natural” de las células cerebrales, que a su vez, reducen significativamente la memoria, el pensamiento crítico, el razonamiento, la resolución de problemas y otras habilidades.
Por lo tanto, poco a poco tu memoria se va acortando y lo que aprendiste hace apenas quince días podría ser ahora un vago recuerdo, pero ¿esto es normal? Quizás prevenir la muerte de células cerebrales te resulte tan increíble como prevenir el envejecimiento, sin embargo, existen métodos comprobados que pueden funcionar para mantener las células cerebrales activas durante un mayor periodo de tiempo.
Pero, ¿cuáles son esas cosas de la vida cotidiana que podrían estar matando nuestras células cerebrales? He aquí siete de ellas:
Alcohol. El consumo excesivo de alcohol daña terriblemente nuestras células cerebrales. Beber de vez en cuando no causa serios problemas, pero el abuso del acohol si lo es. Además de causar muchos otros problemas de salud, el alcohol es un acérrimo enemigo de tu cerebro.
Ingesta de alimentos poco saludables. Las células cerebrales, al igual que cualquier otra célula en nuestro cuerpo, requiere de nutrientes para sobrevivir. Si por algún motivo no reciben las vitaminas y minerales necesarios para su correcto funcionamiento, por consiguiente mueren.
Drogas. Algunas de las drogas más comunes y peligrosas como la cocaína, la heroína, el LSD, mejor conocido como ácido, la mariguana e incluso el alcohol; afectan a la neurona, la engañan, la obstruyen, la violentan o la atrofian, pudiendo llegar a lastimarla para siempre o matarla. Recordemos que las neuronas no se regeneran así es que el número de éstas va disminuyendo hasta que ya no son capaces, por su reducido número, de llevar a cabo eficazmente las funciones del cuerpo.
Fumar. Fumar durante mucho tiempo afecta a las células nerviosas y altera la composición química del cerebro, causando en apariencia daños neuronales.
Conmoción cerebral. Una conmoción cerebral es una lesión que afecta el funcionamiento normal de las células del cerebro. Una conmoción es causada por un golpe en la cabeza o el cuerpo que provoca un movimiento rápido del cerebro dentro del cráneo.
No consumir suficiente agua. La deshidratación crónica de las células cerebrales junto a la falta de sodio y de un aminoácido esencial -el triptófano- son la principal causa de las patologías cerebrales: Alzheimer, Parkinson, Esclerosis múltiple, Ataxia cerebelosa, etc. En el cerebro, como decimos, es imprescindible tanto un buen nivel de hidratación como de sodio en el interior de las células pues ello es absolutamente esencial tanto para la generación de la energía hidroeléctrica con la que se nutre como del buen funcionamiento de los mecanismos de neurotransmisión.
Ahora que conoces los factores que matan las células cerebrales, aquí están 5 maneras sencillas en las que puede mantener tu cerebro sano:
Ejercita tu cerebro. Al igual que todas las células de tu cuerpo, necesitan ejercitarse de manera regular para que puedan mantenerse en forma. Para ello, podrías resolver crucigramas, sudokus o similares, así como jugar scrabble, el cual te ayudará a elevar tus niveles de respuesta.
Comer sano. “Somos lo que comemos”, si quieres mantener vivas tus células cerebrales lo mejor es que comiences a cuidar de lo que te llevas a la boca. Así mismo, la oxigenación del cerebro es necesaria para su buena distribución en el cerebro, ésta la puedes lograr con una simple caminata diaria.
Ejercicio. LA actividad física estimula las células precursoras de donde la neuro génesis se origina, aumentando su proliferación y mantenimiento, mientras que enriquece y promueve la supervivencia de las neuronas inmaduras. También se encontró que el ejercicio funciona como un sistema de retro alimentación que le avisa al cerebro que el cuerpo tiene “gusto” por experimentar más retos cognitivos.
Aléjate de las drogas. Una persona normal pierde alrededor del 10% de la masa cerebral a lo largo de su vida, pero una persona adicta a cualquier sustancia incrementa la destrucción diaria (algunos investigadores señalan como ejemplo el caso de los alcohólicos, que pierden 60.000 neuronas por día).
Reduce el estrés. En situación crónica de estrés, tiene lugar un círculo vicioso de tensión constante, con modificaciones en la estructura de las cédulas nerviosas, potenciando su debilitamiento y muerte. En este desencadenamiento, es la inteligencia (de la defensa, de la preservación) lo que está destruyendo las propias neuronas.