Muchas veces, la solución a los problemas pasa por dar con las palabras precisas, más que por saber qué hacer. Es más, y recurriendo por primera y última vez en este artículo a una frase hecha, si los problemas tienen solución está claro que no tenemos que preocuparnos; y si no la tienen, tampoco vale demasiado la pena darle vueltas… Pero, en uno y otro caso, la frase correcta en el mejor momento es una ayuda inestimable.
Es más, se dice que la diferencia entre ayudar a un hombre y a una mujer ante las dificultades que la vida se empeña en cruzar en nuestros caminos es que a ellos les viene muy bien que les den ideas prácticas, mientras que ellas agradecen más frases de ánimo del tipo “todo va a salir bien”.