Las experiencias negativas de la vida pueden erosionar nuestra auto estima. De modo que nuestro sistema de creencias y comportamientos puede – sin que nos percatemos de ello – propiciar la carencia de auto estima en muchas ocasiones. En estos casos debemos saber como levantar la autoestima.
La autoestima no es algo que se nos implante en la mente así como así ni tampoco es algo que podamos sacar de nuestra cabeza de manera permanente. Sin embargo, una verdadera autoestima implica un sentimiento significativo y duradero de nuestro propio valor real. Los seres humanos somos desde nuestro origen, creados con amor. Criados con amos y educados con amor. Somos además seres con libre albedrío y capaces de crear en nuestro interior – en el inconsciente – las condiciones de bienestar que deseamos.
Sin embargo, es precisamente en el inconsciente en donde se gestionan todos nuestros pensamientos los cuales dependiendo de su origen puede generar resultados positivos o afectivos. Nuestro sentido de la autoestima es entonces, consecuencia de los pensamientos que se generan en el inconsciente.
Es posible que en ocasiones te cuestiones si realmente estás otorgándote el nivel de auto estima que mereces o si estás seguro de que la manera en que te tratas a ti mismo no es la correcta, quizás quieras revisar los siguientes consejos. Te aseguro que puedes adoptarlos en tu vida cotidiana de manera sencilla y te ayudarán a conocerte a ti mismo de una manera mucho más estrecha.
No le temas a lo que no has comenzado. No tengas miedo a fracasar o fallar. Recuerda que si nunca fracasas no tendrás la oportunidad de descubrir la fortaleza y el valor que encuentran en ti.
Reconócete. No busques la aprobación de los demás. Sé tú misma, es inútil buscar continuamente la aprobación de todo el mundo. No intentes gustar a todos.
No te compares. Deja de idealizar a los demás o de compararte, nadie es perfecto y no todo es blanco o negro. Ni tienes que ser de una talla determinada para verte bien, ni tienes que ser Einstein para considerarte inteligente. Debes ser consciente de que esas personas no son tan perfectas como tú las ves y que, además, no es necesario que te compares con nadie.
Felicítate por tus logros por pequeños que sean. No pierdas tu tiempo pensando si eres lo suficientemente buena para esta o aquella tarea. Haz lo mejor que puedas hacer y siéntete satisfecha.