Se pueden hacer un montón de analogías respecto a la vida, en este caso voy a compararla con navegar en un barco. Permíteme hacer algunas comparaciones en esta ocasiones acerca de cómo debemos cuidar que nuestro barco siga a flote y a su vez, que continúe moviéndose hacia nuestro destino.
Cuidar de tu barco es fundamental para tu misión. Sin tu barco en buenas condiciones, no serías capaz de hacerle frente al agua o a las tormentas, tampoco lograrías sentirte seguro ni estable con respecto a tus objetivos.
Sin embargo, algunas personas parecen quedarse estancadas en la parte de los problemas de mantenimiento, haciendo que las cosas parezcan y luzcan mejor. Eso es bueno, pero si es lo UNICO que haces, entonces no serás capaz de llevar tu barco al siguiente puerto. Estarás atrapado en un solo puerto alistándote para partir.